Lilyan Cid: Revelaciones de un largo viaje [parte 3]

Hola Cu-Hivers! Lo prometido es deuda. Acá está la historia del pulover, una prenda que tengo en mi poder desde principios de 2015 y a la que amo, aunque me cuesta siempre decidirme a usarla. Me precio tanto de tenerlo que jamás quisiera que se pusiera viejo.

El t-shirt es un regalo de Ángel Cruz, quien fuera redactor del Diario español As para temas de olimpismo y atletismo. Atleta olímpico y autor en el exquisito Blog Carros de Fuego, del mencionado periódico.

Mi relación con Ángel data del 2011. Ocasión en la que escribí "Yo Confío" el texto del que les hablé en la segunda parte de revelaciones y el primero que lancé al ciberespacio. En mis líneas yo defendí la trayectoria y la obra de Isinbayeva (la imagen que exhibe el pulover) y apostaba por su regreso a la élite, pese a las dos temporadas que llevaba divoriciada del podio en los eventos de mayor rango. El texto, llegó al poder de Ángel, quien había escrito todo lo contario en su blog del Diario As.

Mis líneas eran una manifestación de cabreo para con un universo que - con lógico sentido común- condenaba el declive de la diva del salto con pértiga. Alguien que he admirado desde siempre por su capacidad de destruir imposibles.

Mis argumentos, netamente emocionales, conmovieron a Angel Cruz, quien también admiraba a Elena pero no podía cegar su profesionalidad ante la realidad. Yo no tenía nada que perder, y me defendí con todo el ímpetu que me caracteriza.

El 23 de febrero de 2012, Isinbayeva saltó 5.01 metros en Estocolmo, Suecia. Era su vigésimoctavo récord del orbe y mi buzón estalló. Gracias a la visibilidad que me había dado el debate con mi amigo Ángel Cruz, me felicitaron desde las más diversas latitudes por haber tenido la claridad de otorgarle el beneficio de la duda a la rusa. ¡Y cómo no hacerlo!

Cuando en 2011 decidí emprender este camino, mi primer hito fue llegar a ponerme en contacto con ella. Esos momentos no eran dulces. Su carrera, la de Yelea, estaba estancada, su cuerpo lesionado y su relación con la prensa estaba resentida debido a las constantes críticas que recibió por el descenso de sus resultados. Tener éxito era casi improbable, también por la distancias y las barreras. Pero no me rendí, insistí, labré senderos y lo logré.

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Lo logré y lo repetí porque no hay metas inalcanzables, ni sueños imposibles cuando se cree y se obra por ellos. Ver entrevista

Elena fue, es y será una de mis fuentes de motivación. A veces solo basta recordar alguna de sus conquistas o mirar alguno de sus videos para recargar mis pilas y poner la ilusión a volar.

Justa dosis de inspiración que nos arranca sonrisas y nos pone a soñar con conquistas en mundos paralelos ...

Ángel y su esposa Mari Luz estuvieron en La Habana en 2015. Increíblemente no he encontrado una foto del momento :(. Un viaje a la semilla de un país cuyo talento deportivo admiran desde lo más profundo de su corazón. Trayecto organizado con la intención primera de conocer a sus amigos de Deporcuba. Y lo cumplimos, gastando una fabulosa tarde en el lobby del Iberostar Parque Central.

Desde entonces, protejo mi camiseta y la uso como amuleto, también el libro "Correr hacia un sueño" y un Diario As entre mis preciados tesoros. Con la fe, de que más temprano que tarde, nos volveremos a ver.

Además

• Lilyan Cid: Revelaciones de un largo viaje [parte 2]
• Lilyan Cid: Revelaciones de un largo viaje [parte 1]