Un Trote Imprevisto / An Unexpected Trot [🇪🇸/🇺🇸]

Versión Español

¡Hola, querida comunidad de #hive! Bienvenidos a mi blog. Hoy quiero compartir con ustedes una experiencia de trote que viví recientemente. Después de un tiempo sin correr, decidí hacer un recorrido de 10 kilómetros que, aunque no estaba planificado, resultó ser una grata sorpresa. A pesar de que mi intención inicial era correr solo 5 km, mi cuerpo y energía me llevaron a completar la distancia completa.

Llegamos a la muralla alrededor de las 6 de la mañana. Este día nos despertamos un poco más tarde de lo habitual, ya que normalmente salimos a correr a las 5. Sin embargo, no me importó el retraso. Lo que realmente contaba era mi disposición para correr. Cuando comenzamos, llevaba en mente un ritmo moderado y la meta de correr solo 5 kilómetros. Pero a medida que avanzaba, especialmente al llegar al cuarto kilómetro, me sentí motivado y decidí continuar.

Fue alentador sentir que podía mantener un buen ritmo. No solo estaba disfrutando del paisaje y de la compañía, sino que sentía que tenía energía para afrontar la distancia total. Cada paso que daba me acercaba a la meta y, aunque me costó mantener la concentración, sabía que estaba en el camino de lograr algo significativo. La emoción de correr al aire libre, con la brisa matutina y el sol asomándose, realzaba la experiencia y contribuyó a mi motivación.

Finalmente, logré completar la distancia de 10.09 km en un tiempo total de 58 minutos con 19 segundos. Esto se traduce en un ritmo promedio de 5 minutos con 47 segundos por kilómetro. Para no haber corrido 10 km desde hace mucho tiempo, considero que fue un resultado bastante bueno y satisfactorio. A menudo, subestimo mi capacidad de adaptación, pero días como este me recuerdan que siempre podemos sorprendernos a nosotros mismos si escuchamos a nuestro cuerpo y seguimos nuestro instinto.

Una vez que terminé la carrera, realicé algunas vueltas caminando para soltar las piernas y relajar los músculos. Este pequeño gesto es esencial para evitar lesiones y ayudar a la recuperación. Después, hicimos un breve estiramiento y, cuando sentí que mi cuerpo estaba listo, emprendimos el camino de regreso a casa.

En resumen, espero que les haya gustado escuchar sobre este trote inesperado y cómo, a veces, los planes pueden cambiar para brindarnos momentos inolvidables. Estoy ansioso por volver a enfrentar distancias similares en el futuro. Hasta la próxima y, como siempre, ¡adiós!

Material original de @cjmorillo. Todos los derechos son reservados del autor. Fotografía tomada de mi teléfono Umidigi A11. Los captures de la app Strava. Traductor: Deepl (Versión gratuita).

English version

Hello, dear #hive community! Welcome to my blog. Today I want to share with you a jogging experience I had recently. After a while without running, I decided to do a 10 km run which, although it was not planned, turned out to be a pleasant surprise. Although my initial intention was to run only 5 km, my body and energy led me to complete the full distance.

We arrived at the wall around 6 am. This day we woke up a little later than usual, as we normally go running at 5 a.m. However, I didn't mind the delay. What really counted was my willingness to run. When we started, I had a moderate pace in mind and a goal of running only 5 kilometers. But as I went along, especially by the fourth kilometer, I felt motivated and decided to keep going.

It was encouraging to feel that I could maintain a good pace. Not only was I enjoying the scenery and the company, but I felt like I had the energy to tackle the full distance. Every step I took brought me closer to the finish line, and although I struggled to maintain my focus, I knew I was on track to achieve something significant. The thrill of running outdoors, with the morning breeze and the sun peeking through, enhanced the experience and added to my motivation.

In the end, I managed to complete the 10.09 km distance in a total time of 58 minutes and 19 seconds. This translates into an average pace of 5 minutes and 47 seconds per kilometer. For not having run 10 km in a long time, I consider this a pretty good and satisfactory result. I often underestimate my ability to adapt, but days like this remind me that we can always surprise ourselves if we listen to our body and follow our instincts.

Once I finished the run, I did some walking laps to loosen up my legs and relax my muscles. This small gesture is essential to avoid injury and aid recovery. Afterwards, we did a short stretch and, when I felt my body was ready, we started our way back home.

In summary, I hope you enjoyed hearing about this unexpected jog and how sometimes plans can change to give us unforgettable moments. I look forward to tackling similar distances again in the future. Until next time and, as always, goodbye!

Original material by @cjmorillo. All rights reserved by the author. Photo taken from my Umidigi A11 phone. Captures from the Strava app. Translator: Deepl (Free version).

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