_{Portada editada en Canva (fuente original de la imagen de fondo).}

Trato de mantenerme al tanto de la todavía joven campaña de Grandes Ligas todo lo que puedo, aunque vencer la inflación cubana coloca muchas tareas por delante de sentarse a ver un partido en vivo, que es lo que más disfruto. No obstante, ayer me propuse sí o sí disfrutar de la oferta nocturna que históricamente transmite ESPN todos los domingos bajo el nombre de Sunday Night Baseball. El partido, que comenzó con cierto retraso debido al tiempo, enfrentó a los Dodgers y los Padres, ambos equipos de la división oeste de la Liga Nacional. En el orden individual me interesaba particularmente el duelo de japoneses entre Yu Darvish—un lanzador que parecía destinado a mejores cotas cuando arribó a la Gran Carpa—y el fenómeno Shohei Ohtani, cuya imagen se ha dañado un tanto por el escándalo de apuestas de su intérprete. A pesar de que el cartel del equipo de Los Ángeles es superior, los de San Diego no tienen una plantilla menor, sobre todo con la presencia de estrellas con mucho brillo por emitir todavía como Manny Machado y Fernando Tatis Jr.

A la lomita por los Dodgers se subió el zurdo James Paxton, un lanzador que en los primeros compases del partido se mostró sólido, con una recta que emuló la velocidad de Darvish, en el orden de las 94 MPH. Lo propio hizo el japonés, que en su primer enfrentamiento con Ohtani lo terminó dominando con una preciosa cutter que se le fue cerrando al ex de los Angelinos. Ya en la parte alta de la tercera entrada los de San Diego amenazaron con abrir el marcador. Paxton permitió doblete sobre curva de Eguy Rosario, seguido de sendos boletos concedidos a Bogaerts y Tatis Jr. La escena quedó servida para el poderoso Jake Cronenworth, pero este roleteó directo hasta la posición donde se encontraba Betts, que pisó segunda y lo venció en primera. Darvish liquidó sin muchas sospechas la parte baja de la tercera entrada, en la que volvió a dominar a Ohtani.

En el cuarto episodio, Machado sacudió un violento cuadrangular de 418 pies sobre una apetitosa recta alta de Paxton para registrar la primera anotación del partido, en tanto Kike Hernández agarró en la cerca de la pradera izquierda una buena conexión de Luis Campusano. El reconocido comentarista Guillermo Celis diría que al receptor de ascendencia dominicana solo le faltó "la galleta en el desayuno" para conseguir el jonrón (seguí el partido por la transmisión de ESPN en inglés). Darvish continuó mostrando su amplio repertorio en el cierre de la entrada, con sweeper incluido, pero el peligroso Freeman le cazó uno para abrir con doble en favor de Los Ángeles. Por cierto, no era una noche inteligente para envíos rompientes, y acto seguido Will Smith le interceptó el mismo lanzamiento para empujar al ex de Atlanta y empatar el match. Luego Max Muncy olió sangre y le devolvió a 103.2 MPH una recta de Darvish que aterrizó en las gradas del jardín derecho. El servicio de estadísticas de la transmisión informó que el palo de Muncy habría sido jonrón en cualquiera de los treinta estadios de Grandes Ligas. Los bates comenzaban a hacer daño.

ENGLISH VERSION

Chronicle of a Sunday Night Baseball

I try to keep up with the still-young Major League Baseball campaign as much as I can, although beating Cuban inflation puts many tasks ahead of sitting down to watch a live game, which is what I enjoy most. Nevertheless, yesterday I made it a point to enjoy the Sunday Night Baseball via ESPN. The game, which started with some delay due to weather, pitted the Dodgers and Padres, both teams in the National League West division. In the individual order, I was particularly interested in the Japanese duel between Yu Darvish—a pitcher who seemed destined for better heights when he arrived in the Big Tent—and phenom Shohei Ohtani, whose image has been somewhat damaged by his interpreter's gambling scandal. Although for me the Dodgers have a superior lineup, San Diego has a good cartel, especially with the presence of stars with plenty of shine like Manny Machado and Fernando Tatis Jr.

On the mound for the Dodgers was left-hander James Paxton, a pitcher who in the early stages of the game was solid, with a four-seam fastball that emulated Darvish's speed, on the order of 94 MPH. So did the Japanese, who in his first confrontation with Ohtani ended up dominating him with a beautiful cutter that closed the former Angel. In the top of the third inning, San Diego threatened to open the scoring. Paxton allowed a double from Eguy Rosario on a curve, followed by consecutive walks given to Bogaerts and Tatis Jr. The scene was set for the powerful Jake Cronenworth, but he hit a roll to Betts, who stepped on second and beat him in first base. Darvish finished off the bottom of the third inning without much suspicion, in which he again dominated Ohtani.

Then, in the fourth inning, Machado hit a 418-foot home run over an appetizing fastball by Paxton to score the first run of the game, while Kike Hernández caught a good connection by Luis Campusano on the left field fence. Renowned commentator Guillermo Celis would say that the catcher of Dominican descent only missed "the cookie for breakfast" to get the home run (I followed the game on ESPN's English broadcast). Darvish continued to show his wide repertoire in the bottom of the inning, with his sweeper included, but the dangerous Freeman caught one to open with a double in favor of Los Angeles. By the way, it was not a smart night for breaking pitches, and so Will Smith intercepted another sweeper to push the former Atlanta player and tie the match. Then Max Muncy smelled blood and returned a fastball from Darvish with a 103.2 MPH smash that landed in the right field bleachers. The broadcast stats service reported that Muncy's thunder would have been a home run in any of the thirty Major League ballparks. The bats were starting to do damage.

Sweet swingin' Manny 😍 pic.twitter.com/MHxc9ulSSS

— San Diego Padres (@Padres) April 15, 2024

No-doubter from Max! pic.twitter.com/pvcjEmtqtb

— Los Angeles Dodgers (@Dodgers) April 15, 2024

No obstante, Paxton logró dominar sin contratiempos la parte alta de la quinta entrada, en tanto su parte baja nos reservaba el tercer duelo Darvish vs. Ohtani, que se saldó en favor del primero apelando a una cutter que lanzó con un movimiento diferente, cruzando al joven astro que ha tenido un buen arranque en su nueva casa. Paxton arrancó con boleto el sexto inning para enfrentar a Profar, un ex de los Rangers que también parecía que estaría sonando más a estas alturas de su carrera. En una noche finalmente nefasta en materia de control, el zurdo puso hombres en primera y segunda sin outs concediéndole boleto al nacido en Curazao, activando la grúa de Dave Roberts para traer al derecho Ryan Brasier. Este tampoco vino controlado y llenó las bases de progenitores. Si bien logró que Campusano bateara para doble play, entró la carrera que colocaba a San Diego a una del empate, que llegó por mediación de violenta conexión del jovencísimo Jackson Merrill a la que Betts respondió bien en principio, aunque no pudo completar el out.

ENGLISH VERSIONHowever, Paxton managed to dominate the top of the fifth inning without setbacks, while the bottom was reserved for the third Darvish vs. Ohtani duel, which was settled in favor of the former by appealing to a cutter that he threw with a different motion, crossing the young star who has had a good start in his new home. Paxton booted the sixth inning to face Profar, a former Ranger who was also expected to generate more noise at this point in his career. On an ultimately dire night for control, the lefty put men on first and second with no outs granting the Curacao native a walk, so activating Dave Roberts' crane to bring in righty Ryan Brasier. He also came unchecked and filled the bases with progenitors, but managed to get Campusano to hit into a double play although entered the run that put San Diego one away from a tie, which came via a violent connection of the very young Jackson Merrill to which Betts responded well in a first move, but could not complete the out.

_{Jackson Merrill (source).}

El relevo de los Padres contuvo la ofensiva de los Dodgers en la parte baja de la sexta, pero J.P. Feyereisen no corrió la misma suerte. El estadounidense no pudo hacerse justicia en el siguiente episodio, cuando fue víctima de su propio descontrol y un eléctrico doblete con bases llenas del antillano Profar, que le dio "en el queso" a la pelota—copyright Candy Maldonado—haciéndola rebotar en la cerca del jardín central. Así San Diego tomó una ventaja de tres carreras que a la postre fue decisiva, bien protegida por el relevo de Yuki Matsui, el recién llegado pitcher nipón que llegó a ser cortejado por los Yankees tras unos diez años en el exigente béisbol asiático. En la octava entrada los radicados en el Petco Park volvieron a atacar en casa ajena, aunque dejaron finalmente a un encendido Merrill en segunda. Ohtani, ya sin su coterráneo en la lomita, abrió la parte baja de ese capítulo con inapelable hit al jardín central, rompiéndole varias costuras a la pelota lanzada por Wandy Peralta. Mas el japonés quedó a la deriva en segunda base con Muncy en el home plate, dominado por el oriundo de San Francisco de Macorís, un jugador con el que simpatizo.

ENGLISH VERSIONThe Padres' relievers held off the Dodgers' offense in the bottom of the sixth, but J.P. Feyereisen didn't have the same luck. He could not do himself justice in the next episode for his team and the fans at Dodger Stadium, when he fell victim to his lack of control and an electric bases-loaded double by Caribbean Profar, which hit the ball straight off the center fence. Thus San Diego took a three-run lead that ultimately proved decisive, well protected by the relief of Yuki Matsui, the newly arrived Japanese pitcher who the Yankees courted after some ten years in the demanding Asian baseball. In the eighth inning, the Petco Park-based team struck again but finally left a red-hot Merrill on second. Ohtani, now without his compatriot on the mound, opened the bottom of the eighth inning with a hit to center field, breaking several seams on a ball thrown by Wandy Peralta. Although the Japanese was left adrift at second base with Muncy at home plate, dominated by the San Francisco de Macorís native.

That's a pretty relevant swing. pic.twitter.com/DzgX9DlT7f

— San Diego Padres (@Padres) April 15, 2024

Nick Ramírez vino con el encargo de mantener la distancia en tres carreras, pero tuvo una bienvenida irrespetuosa cortesía de Machado, que le conectó sencillo a la banda contraria y luego le llegó a segunda por wild pitch. El también conocido como "El Ministro de Defensa"—a quien pronto veremos nuevamente sacando outs increíbles—también llegaría a tercera sin poder cruzar el home plate. La escena quedó servida para la entrada del lanzallamas Robert Suárez, con rectas endemoniadas que toparon las 98 MPH. El venezolano tuvo algunos contratiempos con el control pero terminó haciendo batear para doble play a Kike Hernández, cerrando una victoria para su equipo que los coloca nuevamente jugando para .500, con balance de 9-9. Los Dodgers se mantienen primeros con 11-7, con Arizona y los propios Padres pisándoles los talones. Solo los Yankees han ganado más que los de Los Ángeles este año. Díganme qué tal les ha parecido este repaso del Sunday Night Baseball y me impondré de algún modo la tarea de repetirlo la próxima semana, en un partido que debe tener sabor cubano por la presencia de Adolis "El Bombi" García.

ENGLISH VERSIONNick Ramirez came in with the assignment of keeping the distance at three runs, although he had a disrespectful welcome courtesy of Machado, who hit a single to the opposite side and then reached second on a wild pitch. The man also known as "The Minister of Defense"—who will be making incredible outs again very soon—would also reach third without crossing home plate. The scene was set for the entrance of the flamethrower Robert Suárez, with demonic 4-seam fastballs that reached 98 MPH. The Venezuelan had some setbacks with his control but ended up making Kike Hernández hit into a double play, closing a victory for his team that puts them back playing for .500, with a balance of 9-9. The Dodgers remain first at 11-7, with Arizona and the Padres close on their heels. Only the Yankees have won more than Los Angeles this year. So let me know how you like this Sunday Night Baseball review and I'll somehow set myself the task of repeating it next week, in a game that should have a Cuban flavor because of the presence of Adolis "El Bombi" García.

_{Capturas de pantalla de mi laptop mientras disfrutaba el partido y preparaba la crónica.}

_{Capturas de pantalla de mi laptop mientras disfrutaba el partido y preparaba la crónica.}

_{Capturas de pantalla de mi laptop mientras disfrutaba el partido y preparaba la crónica. La instantánea muestra los zapatos de Ohtani durante el partido.}

Shohei Ohtani talking about his shoes in English 🔥 pic.twitter.com/oElxKgQ2g0

— ESPN (@espn) April 14, 2024

_{Edited with Canva.}