Del éxito al fracaso (SPA-ENG)
Si les preguntara que jugador de fútbol ha disputado 3 finales consecutivas de la copa del mundo, la mayoría seguramente indicaría sin pensarlo a Pelé, esa respuesta es errónea, no ha sido el; solo algunos estudiosos del juego más popular en todo el planeta diría Marcos Evangelista de Morães, o Cafú como se lo conoce en el ambiente deportivo.
Efectivamente, Cafú es el único jugador en todo el mundo que ha tenido esa posibilidad, y no le ha ido mal por ciento, ganó 2 (1994 y 2002) y perdió una (1998). Adicionalmente ha ganado dos copas América con su selección nacional y una Champions League con el Milán.
Como a todos en esta vida, los años nos pasan y el retiro es una obligación, más aún en el deporte de alta competencia, cuando la respuesta física ya no está acorde a los estándares necesarios para continuar en ella.
En los últimos tiempos los jugadores de fútbol más prestigiosos y cotizados del mundo, tienen entre la enorme fila de personal que viven de ellos, asesores financieros que están allí para salvaguardar el capital y si es posible incrementarlo para cuando ese retiro sea una realidad incontrastable. Pero esos asesores no siempre aconsejan de la mejor manera, o lo que es peor, los interesados, en este caso los jugadores, no tienen en cuenta sus consejos y se dedican a gastar como si las fuentes de ingresos continuaran fluyendo y en muchas ocasiones el pozo se seca. Tampoco descartemos malas inversiones, nadie es perfecto y mucho menos los que trabajan con las diversas herramientas financieras en mercados en ocasiones imprevisibles.
Seguramente algo de esto ocurrió con Cafú y en los últimos tiempos ha tenido que desprenderse de varias de las propiedades adquiridas durante su período de vigencia que por supuesto estuvo acompañada de ingresos exorbitantes; no escapa al conocimiento de todos los seguidores del fútbol que las grandes estrella así como los jugadores mediocres que han tenido la suerte de estar en el equipo correcto en el momento oportuno, obtienen ingresos de gran relevancia tanto de sueldos, como premios, bonos, publicidad, imagen y otra gran cantidad de actividades que despliegan durante su época de bonanza.
Cafú evidentemente está teniendo graves dificultadas económicas y en los últimos tiempos ha tenido que desprenderse de varias de sus propiedades que según se cuenta alcanzó a 32 en su época de mayor éxito. Folha de São Paulo ha mencionado que en estos últimos días ha entregado una enorme mansión en un barrio exclusivo de ese estado de Brasil, para ser subastada y cancelar las enormes deudas con el fisco. La mansión valuada en 7 millones de dólares se vendió por la mitad de su valor real, ni en eso tiene suerte el ex jugador.
En apariencias su declive económico comenzó cuando fundó una compañía de representación de jugadores que no ha tenido éxito y lo ha llevado a esta situación ruinosa, cuesta creer que en los tiempos que corren no tenga un asesoramiento adecuado y que no haya sabido diversificar sus inversiones y morigerar sus gastos.
De esta manera, Cafú se agrega a una larga lista de deportistas famosos que han dilapidado su fortuna, por diferentes causas, pero la consecuencia es la misma.
Veo con cierta preocupación y sorpresa que varios jugadores brasileños, antaño exitosos y grandes estrella están en situación similar o peor, no puedo evitar recordar las noticias sobre Adriano que se han conocido por estos días, o la de Ronaldhino algunos pocos años atrás, por aquí también hemos tenido algunos casos de deudas, principalmente con el fisco aunque no parece de gravedad como estas ¿qué está pasando?
From success to failure
If I asked you which football player has played in 3 consecutive World Cup finals, most people would probably say Pelé without thinking twice. That answer is wrong, it hasn't been him. Only some experts on the most popular game on the planet would say Marcos Evangelista de Morães, or Cafu as he is known in the sporting world.
Indeed, Cafu is the only player in the world who has had that opportunity, and he hasn't done badly, winning 2 (1994 and 2002) and losing one (1998). Additionally, he has won two Copa América with his national team and a Champions League with Milan.
Like everyone in this life, the years pass us by and retirement is an obligation, even more so in high-competition sports, when the physical response is no longer in line with the standards necessary to continue.
In recent times, the most prestigious and sought-after football players in the world have, among the huge ranks of personnel who live off them, financial advisors who are there to safeguard their capital and, if possible, increase it for when retirement becomes an undeniable reality. But these advisors do not always give the best advice, or what is worse, the interested parties, in this case, the players, do not take their advice into account and spend as if the sources of income continued to flow and on many occasions, the well dries up. We should not rule out bad investments either, nobody is perfect much less those who work with the various financial tools in sometimes unpredictable markets.
Surely something of this happened with Cafu and in recent times he has had to get rid of several of the properties acquired during his period of validity which of course was accompanied by excessive income; It is not lost on all football fans that the great stars, as well as the mediocre players who have been lucky enough to be in the right team at the right time, earn significant income from salaries, prizes, bonuses, advertising, image and a host of other activities that they carry out during their time of prosperity.
Cafu is having serious financial difficulties and has recently had to get rid of several of his properties, which it is said reached 32 during his most successful period. Folha de São Paulo has mentioned that in recent days he has put up for auction a huge mansion in an exclusive neighborhood of that state of Brazil, to be auctioned off and cancel the huge debts with the treasury. The mansion valued at 7 million dollars was sold for half of its real value, and the former player has no luck in that either.
His economic decline began when he founded a player representation company that has not been successful and has led him to this ruinous situation. It is hard to believe that in these times he does not have adequate advice and that he does not know how to diversify his investments and moderate his expenses.
In this way, Cafu joins a long list of famous sportsmen who have squandered their fortune, for different reasons, but the consequence is the same.
I see with some concern and surprise that several Brazilian players, once successful and big stars, are in a similar or worse situation. I can't help but remember the news about Adriano that has come out in recent days, or that of Ronaldinho a few years ago. We've also had some cases of debts here, mainly with the tax authorities, although they don't seem as serious as these. What's going on?
Héctor Gugliermo
@hosgug